El término municipal de Trevélez forma parte del Parque Natural de Sierra Nevada y se ubica en su vertiente sur. Siendo el municipio más alto de la Peninsula Ibérica, se encaja en las laderas del Mulhacén y disfruta de un aire fresco y limpio con el que se curan sus afamados jamones.
Los tres barrios, alto, medio y bajo, que conforman el casco urbano, se articulan en un ármonico descenso hasta las orillas del río Trevélez, susurro permanente de aguas cristalinas donde abundan las truchas.
La mirada tiene el límite blanco de las crestas de Sierra Nevada y los barrancos fragosos, pintados por el verde de una vegetación singular, lugar ideal para la práctica del senderismo y reponer fuerza después, en cualquiera de los fabulosos y tradicionales bares del pueblo.
Se puede disfrutar de unas vistas preciosas e inmejorables del paisaje, así como de la característica arquitectura típica de la Alpujarra, casas perfectamente adaptadas a lo quebrado del terreno y a la climatología de la zona, que se ordenan en estrechas calles, adornadas con el verdor de macetas y plantas, donde perdura la memoria de su pasado morisco.